Las plantas que viven en el aire, llamadas también plantas aéreas, pertenecen al género Tillandsia y a la familia de las Bromeliaceae . Cuentan con más de 650 especies. Se les encuentra en bosques, montañas y desiertos de centro américa, Sudamérica, y el sur de los Estados Unidos. Si deseas conocer un poco más sobre estas hermosas plantas, puedes revisar nuestro artículo "15 Plantas que viven en el aire".

Las principales características de cultivo de estas plantas son que, la mayoría, son muy resistentes a condiciones que para otras plantas resultan adversas y que pueden ser colocadas en casi cualquier parte sin demandar muchos cuidados. Eso, sumado a sus cualidades ornamentales basadas en su maravillosa forma de crecer, y la belleza de su floración, las convierte en la primera elección para decorar tu jardín, casa u oficina.

Cuidados mínimos para cultivar tillandsias

Las tillandsias son muy resistentes a las condiciones adversas, sin embargo te mostramos algunas de sus mínimas exigencias que requieren para sobrevivir por largo tiempo.

Contenedores

Pueden emplearse distintos tipos de contenedores para contener estas plantas que viven en el aire.

Por lo general se hacen con alambres entretejidos donde se coloca a la planta. Es recomendable colocar un trozo de la concha de un árbol en contacto con las raíces de la planta. Estos contenedores, se pueden guindar en cualquier parte del jardín. Si deseas usar esta planta en interiores, te recomendamos que cultives varias, tengas algunas en exteriores y otras en interiores las rotes periódicamente. La rotación dependerás hacerla cuando veas que la planta del interior pierde sus verdes, y su vivacidad.

Puedes usar contenedores de cristal de formas diversas con piedras coloridas. También cilindros o bolas de madera, o cualquier otro material, en cuyo centro esté enclavado un alambre. En el extremo libre, puedes torcer el alambre de manera que pueda contener a la planta en el aire. Puedes emplear pequeños pesebres, elevados en diversos niveles, para usar cascadas con las plantas. Hay quienes colocan contenedores de alambres tejidos con arabescos o diversas formas geométricas y colocan la planta en su interior.

Luz

Las tillandsias prefieren, por lo general, luz difusa o indirecta en verano. En invierno, toleran la luz solar directa.

Reproducción

Su reproducción puede ser por polinización o por producción de semillas. Como no se autofertilizan, debe producirse el intercambio de polen entre plantas de la misma especie, para lo cual los insectos, como las abejas, juegan  un papel vital.

Ellas también se multiplican mediante el brote de retoños. Una planta puede originar muchas plántulas y al conjunto se le denomina colonia. La separación de los retoños de la planta madre hace que éstas se reproduzcan más, produciendo nuevas plantas y colonias.

Riego

El riego de las plantas aéreas es ideal hacerlo con agua de lluvia, que es de un pH acido. Las especies bulbosas no pueden regarse excesivamente porque pueden morir. Lo mismo ocurre con las especies que poseen tricomas. El riego puedes hacerlo con un rociador. Si observas deshidratación, puedes colocarla en un recipiente con agua por 30 minutos.

Poda

La poda de estas plantas es relativamente fácil, ya que consiste en separar con cuidado los retoños de la planta madre. Algunas de las tillandsias mueren después que florean, en este caso, puedes deshacerte de la madre en lugar de las hijuelas. Aunque se recomienda dejarlas por un tiempo, porque los detritos de la madre planta, ya muerta, pueden servir de nutrientes para los nuevos retoños.

Fertilizantes

Si las plantas están en interiores, puedes rociarla con fertilizantes comerciales o preparadas en casa, al menos dos veces al mes.

Temperatura

Toleran temperaturas que van desde 10 a 32°C. Son muy sensibles a las heladas, pues son plantas de origen tropical. Salvo la Tillandsia usneoides, que puede tolerar hasta -10°.

Plagas

La plaga más común que ataca a las plantas que viven en el aire, es la araña roja ( Tetranychus urticae) la cual crece en el envés de las hojas. La planta se vuelve amarilla, luego aparecen bacterias y hongos. También son atacan por cochinillas ( Dactylopius coccus). Ambas pueden ser tratadas con rociados periódicos de jabón potásico.