Cabeza de Medusa. Origen, descripción, Cultivo, Cuidados, Propiedades.

La cabeza de medusa es una planta exótica muy suculenta originaria de Sudáfrica. Es de apariencia cactácea,  su nombre se debe al parecido de la diosa mitológica Medusa. Este es un tipo de planta que puedes cultivar en pleno sol o semisombra, en jardines o macetas mediante sus semillas o esquejes y con cuidados especiales.

Índice

Origen de la Cabeza de Medusa

Es una especie nativa de Sudamérica, todavía es muy común en torno a Ciudad del Cabo, donde crece en afloramientos rocosos en la costa o en las arenas profundas. Particularmente en la Península de Shale Renosterveld es muy común. origen de la cabeza de medusa

Descripción

Es una planta exótica suculenta que posee un tallo corto que mide unos 30 cm de largo y almacena el agua del cual brotan tallos ondulados con pequeñísimas hojas lanceoladas, las cuales no duran mucho tiempo en la planta.

Físicamente se parece a la cabeza de una medusa con múltiples rama que parece como una serpiente que sale producida de un caudex en el centro de forma cilíndrica o cónica, que mide hasta 5 cm de largo y 10 cm de diámetro, con brazos delgados y suaves, que pueden crecer hasta 30 cm, de color verde oscuro, con hojas de hasta 1 cm de largo y caducas.

A veces supera 1 metro de diámetro, en partes ocultas en el suelo tapadas con numerosas ramas de recolección. Sus cabezas de flores se agrupan en el centro de la planta y de color amarillo-verdoso. Tiene frutos capsulares con semillas ovales en el centro.

Botánica de la Cabeza de Medusa

La cabeza de medusa pertenece a la familia de las Euphorbiaceae, que científicamente se le llama Euphorbia caput-medusae, fue descrito y publicada por Carlos Linneo en Species Plantarum . Su nombre genérico proviene del médico griego del rey Juba II de Mauritania y su epileto latino que significa cabeza de medusa

Variedades de Cabeza de Medusa

Dentro de este numeroso género existe un pequeño grupo de variedades con una forma muy parecida a una medusa que son muy cultivadas, entre las cuales tenemos:

Euphorbia woodii:

Es una variedad nativa del Sureste de la Provincia de  el Cabo en Sudáfrica, esta forma parte de la familia de las Euphorbias medusoides o cabezas de medusas, presentando la misma similitud de la figura mitológica de la medusa. Esta especie se identifica por tener un tallo central de donde brotan diferentes brazos, con flores amarillas.

Euphorbia gorgonis:

Se trata de una variedad de planta suculenta muy pequeña, oriunda de Sudáfrica en la región de la Costa entre el rio Zwartkops y entre colinas. Su contextura principal es globoso o obconico, con una aureola de ramas cortas. Sus primeras hojas solo están presentes en el desarrollo de los nuevos y caducan pronto, son simples, agudas y lanceoladas.

Su inflorescencia solitaria en las cavidades, erguida y vigorosa. Su fruto en forma de cápsula subgloboso, con semillas agudas en un extremo, ovoides, tuberculadas, de color gris-negruzco.

Euphorbia flanaganii:

Es una especie originaria de Sudáfrica en la Provincia del Cabo. Esta es un arbusto enano con un conjunto de plantas suculentas y espinosas, de un volumen de 0,02 a 0,05 metros de altura, que se localiza a una elevación de 30 a 185 metros de altura.

Euphorbia decepta:

Al igual que las especies anteriores en proveniente de la Provincia de Cabo en Sudáfrica. Es una planta enana suculenta, sin espinas, ni hojas, de menos de 80 cm de altura, con un tallo similar a un  caudex o un tubérculo, parcialmente enterrado en el suelo. El tallo y sus ramas son parecidos al color de la tierra. Esta es una especie representante característico del grupo medusae.

Existen otros tipos de especies de la familia de las Euphorbia, entre las cuales tenemos las siguientes:

Euphorbia aphylla:

Es una especie de arbusto nativa de las Islas canarias. Posee tallos sin hojas e inflorescencias sésiles. Forma una unión  libremente ramificada con suculentos tallos, alcanzando una altura de unos 2,5 metros.

Euphorbia atropurpurea:

Esta especie es nativa de Tenerife, además se encuentra con frecuencia en Teno, Ladera de Güimar y Santiago del Teide, la cual de desarrolla en terrazas, barrancos y laderas con cierta humedad. Es de hábito  arbustivo, con tallos y ramas suculentas sin espinas, el cual puede sobrepasar una altura de dos metros, que además se le conoce como “tabaiba majorera” o “tabaiba roja”.

Sus largas hojas forman una roseta en el extremo de las ramas, de un color verde azulado. Sus flores de color rojo oscuro poseen brácteas de más de 1 cm, que florecen en invierno y primavera. Los frutos son cilíndricas rojas con tres simientes de coloración castaño. Por su vistoso porte y floración se utiliza como planta ornamental para jardines.

Euphorbia balsamífera:

Se trata de una especie que se encuentra distribuida de Canarias hasta Arabia, en regiones áridas y semiáridas. Este arbusto perenne posee un tronco suculento, a menudo rastrero al estar descubierto al viento. Se diferencia de las demás especies más cercanas por tener una inflorescencia terminal con una sola flor. La savia no es tóxica, la cual fue usada por los guanches como un chicle para limpiar los dientes

Euphorbia canariensis:

Es una especie nativa de las Islas Canarias, su nombre común es “cardón” y según la ley del gobierno de Canarias se considera un símbolo natural de la isla de la Gran Canaria. Posee tallos cuadrangulares, con un aspecto candelabriforme, con espinas dobladas y vigorosas, mostrando una floración en su extremo superior, presentando un gran  crecimiento vertical de 4 metros y horizontal de 150 metros.

Euphorbia characias:

Procedente de todo el Mediterráneo, que se le llama “euforbio mediterráneo”, desarrollándose en caminos, escombros, barrancos y hasta la cima de las montañas. Se trata de una especie de arbustos con menos de 1 metro de altura, tallos blandos de color púrpura verdoso cubierto de vellosidades y leñosos en sus bases.

Sus hojas están dispuestas a lo largo de los tallos en forma de espiral, de un color verde azulado, con pequeñas flores sin pétalos, situados en racimos compactos redondeados que resaltan sobre el resto del follaje desde el principio de la primavera y a principios de verano.

Euphorbia berthelotii:

Es nativa de las Islas Canarias, en las Isla La Gomera. Esta especie arbustiva es parecida a la Euphorbia obtusifolia , que se diferencia por su porte que es menor y más achaparrado y densamente ramificado, con tallos que se destacan por su color gris-rojizo, con una inflorescencia amarilla-verdosa.

Euphorbia helioscopia:

Se trata de una variedad de planta anual herbácea originaria de Europa y Asia, que se le conoce como “lecherula”, “lechetrezna girasol”, “pichoga” o “tornagallos”, pero raramente se ha naturalizado en algunos lugares del norte de África y América, donde crece en la vera de los caminos y en las praderas. variedades

Tamaños

Conforma interesantes arbustos de tamaños reducidos compuestas por diversas cabezas generalmente muy próximas entre ellas, el cual su tallo central alcanza a medir hasta 30 cm de largo y hojas hasta de 1 cm de largo.

Colores

Los tallos son de un color verde oscuro, con flores de un color amarillo.

Formas

El tallo central es corto, grueso, con brazos suaves y delgados en forma similar a la cabeza de la conocida diosa mitológica medusa.

Como se cultiva la Cabeza de Medusa

Al cultivar esta planta debes tomar en cuenta los siguientes aspectos:

  • Se puede cultivar al sol o la semisombra e interiores bien iluminados.
  • En cuanto a su cultivo puede utilizar el suelo con sustratos específicos para cactáceas y otras crasas, con una cobertura superior de arena gruesa y no aplicar mucho sustrato ricos en nutrientes. Se trasplantan en primavera cuando las raíces broten pos debajo de la maceta.
  • Si se cultiva en climas cálidos crece mucho más rápido, en temperaturas que se mantengan entre los 24 y 32 °C, se recomienda no exponerlas a temperaturas menores a los 4 °C.
  • Pueden reproducir mediante esquejes de tallo realizadas en la primavera o en el verano, los cuales se deben dejar secar unos tres días y luego cultivarlos. Estos formarán plantas hijas con crecimientos desordenados sin el aspecto medusoide, sin embargo mediante el cultivo de sus semillas su aspecto es un 100% medusoide.
  • Es mejor cultivarlas en contenedores para facilitar su traslado cuando las zonas de invierno son rígidas.
  • Una vez cultivada y alcanzado cierto tamaño, la planta madre producirá crías en los extremos de los brazos más viejos, comenzando su crecimiento con una inflamación en el extremo de un brazo y rápidamente crece su propio caudex y brazos.

Luego de un tiempo, si no se arraigan solos el brazo se encoge y permite que el retoño se desplace y crece rápidamente si se le da paso al suelo y al agua. Si no tienes cuidados puedes terminar con un invernadero completo lleno de ellos.

En un Jardín

No es muy conveniente el cultivo de esta planta en jardines, porque no se lograrán resguardar de las estaciones de lluvia intensas ni de los grandes inviernos. Pueden cultivarse en jardines siempre que estén protegidas de las heladas.

En Maceta

Es una planta excepcional que dadas por su porte y tamaño pueden ser cultivadas en macetas en los sujetos más brillantes. Puedes cultivarlas en macetas colgantes o en interiores bien iluminados, preferiblemente en macetas anchas con una profundidad de 12 a 15 cm habitual.

Cuidados de la Cabeza de Medusa

A diferencia de la mayoría de las suculentas requiere de cuidados esenciales que te nombraremos a continuación:

  • Progresa bajo el sol directo, necesitando menos de 6 horas por día para que su crecimiento sea digno. El sol ardiente de los días muy calurosos puede ocasionar quemaduras irreversibles en el tallo y la marchitez de brazos y flores. Hay que protegerlas de las heladas y del frío.
  • Maneja bien los largos períodos de sequía ambiental, lo que durante el verano requiere de un riego semanal cuando el suelo este seco varias pulgadas debajo la superficie.
  • Indica de la falta de agua cuando sus brazos se enrollan gradualmente hacia el centro.
  • Se recomienda regar de 3 a 5 días después de haberse secado el sustrato. Riega profundamente, pero no dejes que el suelo se sienta húmedo, ya que puede causar la pudrición de la raíz.
  • Cuando la planta entra en reposo en los días de invierno se deben eliminar los riegos.
  • El exceso de humedad es el peor enemigo de estas plantas, provocando putrefacción del cuello.
  • Cada 3 semanas en verano y primavera agradecen abonados ligeros a base de fertilizantes nitrogenados para incitar el crecimiento de hojas nuevas.
  • No requiere de poda al menos que se quieran eliminar tallos secos o dañados.
  • Es muy invulnerable a las plagas, aunque en momentos puede verse perjudicadas por cochinillas en las espacios de crecimiento. cuidados

Semillas

Posee semillas ovaladas que son utilizadas para su multiplicación.

Flores

Florece en pleno verano, con unas delicadas, hermosas y pequeñas  flores de color amarillo-verdoso agrupadas en inflorescencias solitarias en ciato en el centro de la planta y en el extremo de los brazos. Su floración depende un poco de la climatología.

Otros usos

Resulta una admirable planta que se puede usar en interiores o para terrazas.

Importancia económica de la Cabeza de Medusa

El cultivo se sus especies es una importante ya que se realiza con fines comerciales, y que poseen un gran valor comercial y muy demandadas por los coleccionistas de todo el mundo.

Curiosidades de la Cabeza de Medusa

  • La cabeza de medusa se conoce popularmente debido a su curiosa forma que radica en un conjunto de brotes estrechos que brotan del tallo central proporcionándole un aspecto tan particular parecido a la conocida diosa mitológica medusa.
  • Este tipo de plantas pertenecientes a las Euphorbias poseen un látex en sus tallos, que ellas mismas la utilizan para evitar de ser atacada de sus posibles plagas. Además hay que tomar en cuenta que este látex es bastante tóxico para los seres humanos, por lo que hay que evitar tocarlas y en caso de hacerlo lávese bien las manos y no se toquen ni la boca, los ojos y la cara.
  • La misma puede llegar a perder todos sus tallos cuando la época de sequedad es prolongada, pero que surgirán de nuevo cuando consiga agua con regularidad.

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