El pomelo es un cítrico con desarrolladas propiedades y grandiosa versatilidad en la cocina, pero escasamente utilizado. Es una excelente elección para comer fruta y está incluido en numerosas dietas adelgazantes, no obstante, esta fruta debe comerse con moderación o inclusive eliminarse de la dieta si se sufren ciertas enfermedades y se toman algunos medicamentos.

Según expone a Infosalus la doctora Montserrat Folch, especialista del Hospital Quirón Teknon y autora de "Frutoterapia" (Paidós), el pomelo consigue perfeccionar nuestra salud a través de un gran número de elementos que contienen efectos anticancerígenos, antioxidantes o antiinflamatorios

Beneficios del pomelo

El pomelo es uno de los cítricos menos populares en nuestro país, dado en parte a la preferencia de otras frutas como la naranja, el limón o la mandarina. Este grupo de alimentos es fuertemente calificado por su valioso contenido en vitamina C, un nutriente que participa en multitud de actividades del organismo.

Una serie de beneficios que el pomelo, como cítrico que es, asimismo posee. No obstante, estos no son los únicos beneficios que nos incitan a incluirlo con más frecuencia en nuestra dieta. Sin ir más allá, se trata de una fruta que escasamente posee aproximadamente 40 calorías.

Es fuerte en minerales como el potasio y el magnesio, contiene ácido fólico en su composición, además de carotenoides antioxidantes y vitaminas B2, B1 y A. Eso sí, si existe una particularidad que recalca frente al resto es la cantidad de agua que tiene: un 90% de su composición.

1.-Fortalece el corazón

Los flavonoides, otro de los nutrientes fundamentales del pomelo, suelen tener un efecto efectivo sobre uno de los órganos más significativos del cuerpo humano: el corazón, esto quiere decir que el consumo de pomelo consigue perfeccionar la circulación y fortalecer el músculo cardíaco, beneficiando así la actividad del mismo.

Asimismo, interviene directamente sobre otras afecciones vinculadas con este músculo como, por ejemplo, el colesterol y los triglicéridos, controlando sus niveles y fortificando así el sistema circulatorio.

2.-Un suplemento en la pérdida de peso

Su poco contenido calórico y la grandiosa cantidad de agua que contiene consiguen ser grandiosos aliados en la pérdida o el mantenimiento de un peso saludable. Es indudable que sus funciones no van a resultar milagrosas, pero sí consiguen funcionar como un suplemento adicional a una alimentación equitativa y una rutina de ejercicio diaria.

Estos resultados han sido confirmados por numerosas investigaciones, como el elaborado por el Centro de Investigación Scripps, en Estados Unidos. Los miembros de la muestra que consumieron pomelo fresco durante el estudio mostraron en seguida una disminución importante de los índices de glucosa y una mayor pérdida de peso en relación al resto de colaboradores.

3.-Para perfeccionar la vista

Tal y como hemos visto anteriormente, el pomelo posee significativas sumas de betacarotenos, unos pigmentos que corresponden al grupo de los carotenoides y que disfrutan de propiedades antioxidantes.

Estos no solo retardan el envejecimiento e impiden el estrés oxidativo, además cuidan nuestra vista de las enfermedades que consiguen perjudicarla como, por ejemplo, aquellas asociadas con la edad: las cataratas y la pérdida macular.

4.-Grandioso aliado para las articulaciones

El ácido salicílico es otro de los nutrientes que lideran la composición del pomelo y que más beneficios consigue contribuir a nuestro cuerpo.

Entre ellos, recalca su función en la descomposición del calcio inorgánico que se almacena en las articulaciones y los cartílagos, origen primordial de la artritis, un padecimiento que crea síntomas tan molestos como el dolor y la rigidez de las articulaciones, la inflamación, el enrojecimiento y la reducción de la extensión de ejercicios.

Así, la ingesta de pomelo logra disminuir su presencia en el cuerpo, conservando a raya dicha afección. Asimismo, el ácido salicílico funciona como antiinflamatorio, exfoliante de las células de la piel y controlador de la oleosidad, es decir, la grasa de la piel.

5.-Para conservar a raya el estreñimiento

Como suplemento a su rol en la pérdida de peso, el pomelo igualmente consigue evitar el estreñimiento debido a su contenido de fibra y agua.

Esta medicina natural, que suele ingerirse a manera de jugo, además origina esa regularidad tan necesaria en el sistema digestivo, optimizando como resultado la digestión y la absorción de nutrientes y estimulando un efecto saciante que nos logra colaborar a no comer entre horas.

Por su parte, la fibra desempeña con sus funciones usuales dentro del cuerpo, como desarrollar el volumen de las evacuaciones y proporcionar su expulsión, disminuir los niveles de colesterol circulante, desarrollar el número de bacterias beneficiosas o impedir la una enfermedad que se define por la presencia de divertículos en el aparato digestivo.

6.-Disminuye  el peligro de ictus

Tal y como explica la Asociación Americana del Corazón, la ingesta de pomelo y otros cítricos podría disminuir considerablemente el peligro de ictus isquémico en las mujeres, es decir, la impedimento de una arteria cerebral como resultado de la creación de un coágulo; u otros accidentes cerebrovasculares parecidos.

Unas reseñas que en 2016 fueron confirmados en la Reunión Anual de Neurología en Estados Unidos y que señalan directamente a la presencia de vitamina C en su composición.